En Mali en un pequeño poblado perdido se encuentra la Casa de la Palabra, ahí van los viejos dela tribu para negociar y llegar a acuerdos si existe un conflicto en la población. Está levantada con 8 columnas de adobe No tiene paredes, y solo está recubierta con un techado de paja y ramas.
Así no hay barreras ni obstáculos, ni muros, y las palabras pueden fluir y volar, danzar enlazándose unascon otras. Lo que tiene de curioso esta casa es su altura, pues solo mide 1.50m y para poder entrar en ella, es necesario agacharse y bajar la cabeza, Cuentan los viejos del pueblo que en esta casa se intenta resolver conflictos.
Cuando uno se enfada con una persona, existe la costumbre de que las dos personas en conflicto van a la casa de la palabra. Lo primero que hacen al ir ahí para entrar tienen que bajar la cabeza, y esto es muy importante, porque de inmediato conecta con una emoción importante que es la humildad. Sin la humildad es difícil entrar en diálogo y resolver conflictos. Cuando ya están dentro se sientan uno frente al otro en un tronco.
Se explica que a veces llevados por la discusión del conflicto, alguno intenta levantarse como para atacar al que se ve como rival, y como la casa es bajita al intentar levantarse ocurre que se golpea en la cabeza y el significado es que si la persona se deja llevar por la ira, no va a llegar a ninguna parte en esta negociación, este dolor le recuerda la inutilidad de enfurecerse, que cualquier conversación cualquier pacto debe partir de la serenidad.
La metáfora dela casa dela Palabra, es una gran idea, sugiere tener un lugar donde se pueda tener espacio para resolver un conflicto. Aunque no se cree, tenerla presente como metáfora, conectarse, trabajar y considerar estos puntos:
1. Humildad
2. Gestión de la ira
3. El diálogo
4. El dominio del lenguaje, utilizar las palabras precisas, que no hace daño y que son palabras puente.
Soy Alicia Michel, Master en Ecología Emocional. Puedes escribirme a ecoemociones @gmail.com