A finales del 2014 fuimos mi hija Lucy y yo a la CDMX a la EXPO ENVERDESER super apoyadas por los organizadores (gracias!) pero la verdad es que nos fue fatal y no vendimos casi nada.
Nos permitían dar una pequeña plática a los asistentes y la verdad mientras hablaba me sentí bastante frustrada por que casi no había quien me escuchara.
Pero seis años después me llega este mensaje por whatsapp de alguien que estaba sentada en una de esas sillas y que pude inspirar con mis palabras:
 “Te platico…. hace años tenía la intención de poner la tienda Flor de Saal y en la búsqueda de productos fui a esa Expo”. “
“Con mucha desilusión escuché una conferencia y su enfoque fue económico y de verdad me rompió el corazón el que para nada tocara el tema del medio ambiente o de que las personas tomaran conciencia de no usar productos que no dañen en lo personal y a la tierra”.
“ Y estaba a punto de irme, pero en eso tú subiste a hablar de tu desodorante y me ENCANTO el enfoque que le diste”.
“La verdad no recuerdo mucho lo que dijiste con tus palabras, pero había una energía que se sentía salía de un lugar del corazón y eran palabras honestas”.
“Y eso me volvió las ganas de seguir adelante y de no perder mi enfoque”
“Flor de Saal es una extensión de lo que creo y pienso”.
“Aunque es un negocio, pero para mi es muy importante la intención con que se hacen las cosas y mi principal intención es poner un granito de arena” .
Dice un dicho que podrás olvidar qué te dijeron pero jamás vas a olvidar como te hicieron sentir.
A seis años de ese viaje que hice a la ciudad de México y del cual regresé muy frustrada hoy me doy cuenta que por esa persona a la que le llegó mi mensaje, valió la pena!!
Y a quienes vivan en Guadalajara y sus alrededores les recomiendo que conozcan esta belleza de tienda de la cual ya publiqué en el pasado